¿Cómo estamos gestionando nuestro tiempo? Corremos todo el santo día. ¿Cómo estamos viviendo? ¿Eso es vida? ¿Cuánto más creemos que podremos soportar?
Necesitamos establecer prioridades porque no se trata de falta de tiempo, sino de que queremos hacer demasiadas cosas al mismo tiempo.
En la vorágine diaria pretendemos o pretenden de nosotros que logremos más de lo que se puede gestionar en 1.440 minutos o 24 hs.
Imposiciones, exigencias en obligaciones, tareas, cumplimientos, responsabilidades como en resultados y sin desearlo experimentamos una sensación permanente de insatisfacción además de un tremendo estrés.¿Cómo es el perfil de una persona que nunca tiene tiempo?
-Procrastinan, esto es una forma de evadir, posponer tareas para otro día, costumbre de reprogramar y no cumplir.
-Reflejan un alto nivel de exigencia.
-Poseen dificultades con la asertividad o para decir no, en ocasiones está relacionado con baja seguridad en sí mismos.
-Tienen dificultad para tomar decisiones y decidir bien.
-No planifican, ni tienen una metodología clara de trabajo, todo es improvisación artesanal en sus rutinas de vida o trabajo.
-Realizan multitareas.
-No tienen objetivos claros y al no saber su meta van dando tumbos de un sitio a otro.
-Viven estresados.
La “asertividad” tiene que ver con la comunicación. Asertivo es cuando uno se expresa sin agredir, no se somete a la voluntad de otras personas, exteriorizando sus convicciones, defendiendo sus derechos, manifestándolos eficazmente, teniendo en claro sus obligaciones se muestra congruente sin la intención de perjudicar a nadie, actuando desde un estado interior de autoconfianza; en lugar de estar atrapado en la típica emoción limitante de ansiedad, culpa, angustia o rabia.
Cómo gestionar bien nuestro tiempo.
1)Aprender a tomar decisiones adecuadas, teniendo en cuenta que nuestras acciones deben estar alineadas con los valores y objetivos que nos hemos propuesto.
Al decidirnos por una cosa o por algo, estamos descartando otras elecciones o posibilidades, optar por una decisión es descartar otra. No se puede abarcar todo.
Ej. Si me decido a tomar una clase de inglés, no podré ir a caminar.
2)Delegar, pedir ayuda, subcontratar, tercerizar.
Muchas veces queremos hacer todas las cosas por nosotros mismos, nos resulta difícil confiar en los demás, perdemos protagonismo afectando nuestro ego enfermo, no queremos compartir y menos aún tomarnos un tiempo para enseñar a otros lo que sabemos hacer por miedo a perder posición, poder, prestigio o pretendemos ser indispensables.
Hay tareas que nos absorben mucho tiempo, demandan demasiada energía, no nos satisface realizarlas y no delegamos realizándolas nosotros mismos, porque existe la creencia que delegar es señal de debilidad, incapacidad o incompetencia.
Dedicar nuestra energía y tiempo a lo que en realidad nos aporta satisfacción, somos muy buenos y productivos.
3)Evitar las exigencias, los ‘tengo que’ y el perfeccionismo.
Ocupamos más tiempo del necesario a realizar una tarea, por el alto nivel de exigencia impuesta o autoimpuesta, viviendo bajo el supuesto concepto de que debo ser el mejor, el primero, si no lo hago yo todo es un fracaso y no es lo mismo, o los demás no hacen tan bien como lo hago yo.
El tiempo no se puede controlar. Lo que sí podemos controlar son las tareas que realizamos y administrar como organizarnos mejor.
Cómo organizarnos mejor
1-DEFINIR DE FORMA CLARA Y ESPECIFICA NUESTROS OBJETIVOS
Medible-específico-alcanzable-retador-estableciendo el tiempo-ecológico-recompensante.
2-PLANIFICACION ANUAL, MENSUAL, SEMANAL, DIARIA de las tareas necesarias para alcanzar objetivos.
3-DIFERENCIAR LO URGENTE DE LO IMPORTANTE.
Focalizarse en lo importante.
4-DEDICAR UN 50% MAS TIEMPO A LO IMPORTANTE Y UN 50% MENOS A LO URGENTE.
5-CENTRARSE EN TAREAS PROACTIVAS evitando las reactivas.
6-BUSCAR EL EQUILIBRIO ENTRE REFLEXION Y ACCION.
Hacer cosas todo el tiempo no necesariamente conlleva a conseguir los objetivos.
7-PLANIFICA Y PRIORIZA.
Incluyendo el descanso y ocio.
8-GESTIONA BIEN LAS EMOCIONES.
Para tomar buenas decisiones, comunicarnos mejor y estar más concentrados.
“Una persona que se permite malgastar una hora de su tiempo no ha descubierto el valor de la vida”.