[dropcap]U[/dropcap]na especialista en nutrición destacó la importancia de la inclusión de la leche, yogur y queso en la ingesta cotidiana para evitar problemas en los huesos a partir de la mediana edad. También recomiendan hacer ejercicios, al menos, tres veces por semana.
La mala alimentación puede desembocar en diversos problemas de salud en diferentes etapas de la vida. Es por ello que en esta ocasión, la licenciada en Nutrición Ruth Parra se refirió acerca de la importancia de la ingesta de lácteos para contrarrestar males como la osteoporosis.
Para comenzar, la especialista mencionó que esa patología se define como la pérdida de la densidad del tejido óseo, lo que con el tiempo puede favorecer al deterioro de los huesos, incluso a fracturas. Generalmente está asociado a las mujeres mayores de 50 años que entraron en la menopausia y también se relaciona con determinadas enfermedades.
Para la prevención, Parra aconseja una porción diaria de leche, una de yogur y una de queso, con lo que se cubren los requerimientos de calcio por día. A partir de los 40 años es necesario empezar con los cuidados relacionados a los huesos.
“La sintomatología no es muy llamativa, por lo que se diagnostica a través de estudios médicos, como la densitometría ósea. Algunas señales son la aparición de múltiples fracturas en poco tiempo, principalmente en las zonas de la muñeca y las caderas”, describió.
Se debe realizar un tratamiento médico a cargo de un clínico y en paralelo uno nutricional, en el que se sugiere una buena ingesta de lácteos, acompañado con vitamina D, que se activa con el sol.
Desde el consultorio del nutricionista también orienta al paciente sobre determinados alimentos que no se deben consumir, ya que algunos inhiben la absorción de calcio y se recomiendan otros más adecuados. Se busca suplementar o fortificar los huesos por medio de una dieta específica.
Primordial
La prevención es esencial en la osteoporosis. Esto se logra a través del estilo de vida, la dieta y el ejercicio físico, el cual entre otros beneficios ayuda a mantener la masa ósea, la masa muscular y a ganar en habilidad. Los ejercicios físicos más recomendables son caminar, realizar carrera lenta, gimnasia de mantenimiento, tenis o aerobics.
Apostar por unos hábitos de vida saludables es invertir en salud, no sólo para prevenir la osteoporosis, sino también otros problemas del cuerpo. Entre estos hábitos, la dieta y el aporte correcto de calcio a las necesidades del organismo en cada etapa o momento de la vida. En el caso de las mujeres, durante el embarazo, la lactancia materna, en la etapa premenopáusica y durante la menopausia, las necesidades de calcio son mayores.
