26.2 C
Corrientes
21 noviembre, 2024
VIVIR PLENAMENTE
Entrevistas

Es abuelo de dos nietos y con 70 años atiende su propio restaurante

[dropcap]J[/dropcap]osé Enrique Oneto es propietario del resto bar “Salsa Criolla” en San Telmo (Buenos Aires), desde los 16 años que trabaja y ahora con 70 años atiende personalmente el local. Es abuelo de dos nietos y se reconoce muy amigo del chamamé correntino y contó a “Vivir Plenamente” sobre las diversas dificultadas que ha sobrepasado a lo largo de su vida de las cuales siempre ha sabido dejar atrás.

“Mi oficio primero fue fiambrero, almacenero y supermercadista, luego tuve un criadero de cerdo durante 12 años en los cuales no fue muy bien y volví a San Telmo con máquinas antiguas de gastronomía como ser cafeteras, registradoras y balanzas. Las restauro y las exportamos a cualquier parte del mundo.”, detalló José Enrique sentado cómodamente en una de las mesas de su local.

Además, agrega “durante 21 años realicé este trabajo y caí en la crisis del cepo que nos fundió una vez más. Tomamos otros horizontes y decisiones y pusimos un pequeño bar, luego un restaurante y salimos adelante pagando todas deudas y luchando siempre” …

Como todo buen comerciante José Enrique ha sabido sobrepasar cada dificultad y ha logrado “reconvertirse” siempre que la situación económica social se la demandó. “Ahora con el cepo libre vamos a seguir con el antiguo empleo de las maquinas porque tengo clientes de varias partes del mundo, como se Italia, Francia, Holanda, Hong Kong, Estados Unidos, Colombia, Panamá”, expresa entusiasmado.

Concluyendo el diálogo con “Vivir Plenamente”, dijo: “siempre supimos que si la Argentina entra en guerra Corrientes nos va a defender”, rememorando la reconocida y popular frase, “es un país aparte y me voy a encargar de la exportación”, bromeó.

De esta manera queremos dejarles este pequeño pero muy valioso testimonio acerca de la importancia de saber afrontar con sabiduría y tranquilidad cada dificultad que se presenta en la vida. Además, el detalle de su edad nos deja claro que no existen barreras para realizar las cosas, nuestros adultos mayores necesitan de nuestro acompañamiento y apoyo para realizar cualquier proyecto que se propongan.

Compartamos esta linda historia.

Related posts

La pasión del Carnaval: “Tengo 76 años y a la edad que tengo, siento los tambores y bailo”

Eugenia Godoy

Pequeños Peludos Corrientes: su trabajo solidario con perros y gatos

Marita

Justo Franco: "Queremos dejar de ser pasajeros y queremos conducir"

VIVIR PLENAMENTE

Deje un Comentario

Contactenos