[dropcap]A[/dropcap]yer, se conmemoró el “Día Mundial del Alzheimer“, enfermedad cerebral degenerativa que causa problemas con la memoria, la forma de pensar y el carácter o la manera de comportarse. Esta enfermedad no es una forma normal del envejecimiento. En Corrientes, el trabajo de concientización se realizó desde el Instituto Cerebro, sede de la Fundación Alzheimer Corrientes.
Por la mañana, personal del Centro que trabaja con pacientes que desarrollaron la enfermedad, se dedicaron a informar a la población acerca de ella, de cuáles son los aspectos que deben tenerse en cuenta y que deben funcionar como alarma, y cuáles son las posibilidades de hacer más lento su desarrollo.
En Argentina, se estima que existe aproximadamente entre 300.000 y 400.00 personas afectadas por la enfermedad. En Corrientes, los números se ajustan a esta estadística.
“El alzheimer no tiene cura, eso es lo primero que hay que saber, pero se puede disminuir al mínimo su avance. El trabajo que se hace desde centros como Cerebro es precisamente desarrollar terapias cognitivas y físicas, que permitan mantener las funciones mentales y así permitirles una mejor calidad de vida”, explicó una de las especialistas.
También señaló que el trabajo no debe limitarse a los pacientes. “Hay una realidad: la enfermedad afecta a todo el entorno familiar, incluso no sólo a los cuidadores. Entonces, el tratamiento integral incluye a los familiares, para permitir el mantenimiento de los lazos sociales, más allá de las dificultades que la enfermedad trae en las relaciones”.
El trabajo de concientización se orientó a brindar información acerca de la sintomatología, pero también facilitar estrategias para quienes tratan con personas con distintos grados de avance de la enfermedad.
Algunos de los consejos son:
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Evite discutir cuando la persona expresa erróneamente alguna información. La persona puede decir erróneamente “tengo un hijo”, usted puede decir “sí, uno acá y otro viviendo afuera, Carlos”.
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La fantasía y la realidad comienzan a mezclarse a medida que la enfermedad progresa, esté preparado.
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Evite decirle a la persona “¿no te acordás que…?”. Es muy posible que no lo haga, y reforzará, de esta manera, la falta de memoria.
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Trate de dar claves en lugar de decirle la palabra que no recuerda. Por ejemplo “tu blusa de color amar—”, “tomamos una taza de….” o “ponete el za—”.
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Hable en forma clara , lenta y calmada, sin levantar la voz. Señalar o tocar objetos y figuras puede ayudar a la persona a hacerse entender.
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La música puede ayudar a modificar el ánimo, reduciendo el dolor, la ansiedad y la depresión que interfieren en la comunicación.
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El trabajo con fotografías es un recurso para estimular la expresión de los recuerdos de acontecimientos pasados.
