El dato surge a partir del último informe del Observatorio de la Deuda Social de la UCA. “Se trata de 14 documentos donde se expone la situación de las personas mayores en nuestro país, nosotros le llamamos el Barómetro de la Deuda Social con las personas mayores”, detalló a Vivir Plenamente, Magdalena Saieg, Directora Ejecutiva de la Fundación Navarro Viola.
El estudio comprende un período de cuatro años, del 2017 al 2021. En él, entre otros datos, da cuenta de que el 26% de las personas mayores de nuestro país, una de cada cuatro, vive en situación de pobreza estructural.
“Lo primero a aclarar sobre este dato es que, para medir la pobreza estructural, usamos un método que se llama ´Método Multidimensional´, que incluye seis variables”, describió Saieg y precisó que estos factores tienen que ver con la alimentación y la salud, servicios básicos, vivienda, medio ambiente, educación, empleo y seguridad social.
“Comparado con otros grupos etarios, sobre todo con aquellos que incluyen a los jóvenes mayores de 18 años, las personas mayores están un poco mejor. Esto nos hace una alerta porque significa que es un fenómeno que nos atraviesa como sociedad”, agregó.
Derribando mitos
La directora Ejecutiva de la Fundación Navarro Viola, Magdalena Saieg, contó que otro dato a destacar tiene que ver con el estado de salud de las personas mayores, y en ese sentido sostuvo en primer lugar que “no hay vejez, hay vejeces, porque son datos muy heterogéneos”.
A partir de esta premisa comentó que solo 26% de las personas mayores percibe que su salud está comprometida, mientras que el resto se considera saludable, “esto es importante como para poder charlar sobre sobre el prejuicio o el estereotipo de las personas mayores enferma”.
“Los mayores no se sienten enfermos, se sienten saludables. posiblemente con achaques, con algún malestar, pero sienten que su estado general de salud no está comprometido”, precisó.
También agregó que cerca del 20% de las personas mayores, una de cada cinco, siente malestar psicológico. Sobre este dato sostuvo que “es importante saber es que no es un fenómeno exclusivo de las personas mayores”, sino que esto mismo lo ven en personas menores de 60. “Evidentemente hay una situación, quizás atravesadas por la pandemia y por toda esta exigencia, que nos desafío a nivel emocional”, remarcó.
En esta línea, precisó que casi un 20% de personas mayores no hace ni una consulta anual de control preventiva. “Es un llamado especial de atención, de poder trabajar sobre esto y poder tener nuestros controles médicos preventivos, y en ese mismo sentido algo que la fundación también viene hablando y le viene preocupando hace mucho es el déficit de actividad física”.
Sobre esto último, el informe indica que el 73% de las personas mayores no realiza ninguna actividad física en la semana.
“No estamos hablando de ir al gimnasio y hacer pesas, sino una caminata, el poder hacer alguna actividad que nos permita mover el cuerpo y el esqueleto, porque sabemos el enorme impacto que tiene el mantenernos en actividad con nuestro estado general de salud”, subrayó.
Principales factores del escudo protector
Magdalena Saieg contó que hay dos cosas que hacen que en general la vejez sea mejor. “Lo principal es la educación, el nivel educativo. Todos los indicadores salen un poquito mejor cuando la persona termina el secundario”, describió.
“Lo segundo tiene que ver con el nivel socioeconómico que seguramente pueda estar asociado con el nivel educativo. Al menor nivel socioeconómico, los indicadores suelen ser bastante más complicados y complejos”, agregó.
Recomendaciones para afrontar y acompañar a las personas mayores
En diálogo con este medio, la directora Ejecutiva de la Fundación Navarro Viola, Magdalena Saieg, recomendó a la comunidad que “pensemos en aquellas pequeñas cosas que podemos hacer para mejorar el estado de bienestar general de esas personas”.
Algunos ejemplos tienen que ver con promover y acompañar todo lo que tiene que ver con la actividad física, con generar actividades y propuestas para las personas mayores para que puedan sentirse “acompañados, contenidas, miembros de sociedad, participantes activos de esa comunidad y de ese entorno del cual forman parte”
“Mejorar su bienestar emocional y psicológico a partir de generar nuevos vínculos y redes de apoyo y de contención, son acciones que no requieren grandes inversiones, y mejoran el bienestar general”, comentó.
“Pensemos en pequeñas modificaciones que permitan acompañar esto, como la consulta médica, consultas preventivas. Acompañemos y promovamos que los mayores en nuestras familias tengan estos controles anuales, que puedan preventivamente estar atentos a cuáles son las dificultades que tienen en su salud, acompañar a generar iniciativas con las que puedan estar más activos”, concluyó.
¿Cómo no ser indiferente ante esta realidad?
Por último, Magdalena Saieg, remarcó la importancia de “empezar a visibilizar la vejez y los desafíos que tiene el envejecer en nuestro país, fundamentalmente en las generaciones más jóvenes”.
“Necesariamente tenemos que pensar en una sociedad que incluya a todos, y hoy tienen mayor posibilidad para salir justamente los jóvenes, a quienes vamos a poder decir transformemos esto”, culminó.
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