Joaquín, conocido como Chingolo, gran pescador, es jubilado y vive con su esposa. Día tras día, ambos atienden un pequeño kiosco para generar ingresos, ya que lo que cobran de su jubilación no alcanza, a eso se le suma una enfermedad. Chingolo es diabético y el PAMI le corto los medicamentos, por lo que gasta alrededor de $3.000 mensuales. Pide ayuda para vender sus juguetes.
Joaquín, mejor conocido como “Chingolo”, es un hombre de avanzada edad, pero esto no le impide seguir trabajando. Ahora más que nunca, dado que necesita conseguir el dinero para costear las dosis de insulina que requiere para vivir, y debe aplicarse todos los días.
Pide ayuda para poder vender sus juguetes hechos a mano con latas de gaseosa o cerveza, de los que salen helicópteros, autos, barcos, colectivo, aviones y camionetas.