Con diferentes atuendos y coreografías, los adultos mayores que forman parte de los Centros Integradores de Adultos Mayores municipales (CIAM) hicieron sus presentaciones artísticas en lo que fue el cierre mensual de actividades del programa “Bien Activos”, que impulsa el municipio capitalino.
La directora general de Adultos Mayores, Celina Thones, detalló que “cada grupo presentó una coreografía y trajo su atuendo acorde al tema a presentar. Además, el CIAM del San Gerónimo por ser el anfitrión también presentó su coro de adultos mayores”.
Previamente a las coreografías, los adultos mayores participaron de una divertida clase de zumba.Thones, mencionó que durante la jornada soleada dijeron presente los integrantes de los espacios integradores municipales distribuidos en 23 barrios capitalinos.
“En cada CIAM todos los días ellos desarrollan distintas actividades, laborterapia, deporte adaptado, tejo, sapo, truco, entre otras, de eso se trata este programa denominado Bien Activos”, detalló la directora general.
“Estamos muy contentos con el trabajo realizado porque cada vez más gente se suma, se acerca, conocen de qué se trata y les gusta, por eso se quedan”, resaltó la funcionaria, al tiempo que recordó que quienes deseen sumarse a algún centro, de manera gratuita, deben dirigirse a las oficinas ubicadas en Catamarca 771, de lunes a viernes de 8 a 12.
CANTO A LA VIDA
Entre las participantes de la clase de zumba estaba Luli, que con sus contoneos y despliegue coreográfico nadie creería que a sus casi 70 años atravesó 18 operaciones, “entre ellas dos del corazón”, remarcó.
Es vecina del barrio Nuevo, y llegó con su grupo llamado “Sueño gigante” hasta el parque para disfrutar y compartir junto a sus pares. “Siempre estaba enferma, estuve 4 meses sin caminar, los doctores me dijeron que iba a quedarme en silla de ruedas, y acá estoy disfrutando y diciendo presente en este encuentro, como siempre”, expresó con una energía y vitalidad admirable.
Rosa Iprídimo tampoco quiso perderse este encuentro, aún más teniendo en cuenta que en este cierre de mes su barrio, el San Gerónimo, es el anfitrión. Apoyada en su bastón aclaró que “vamos a cantar y bailar, yo en mi silla nomás, pero igual voy a moverme”, dijo entre sonrisas. Forma parte del coro que en la tarde de este viernes entonó clásicos del folklore litoraleño como Bañado Norte, Puente Pexoa, Kilómetro 11 y Puerto Tirol.
Desde el 2012 participa del CIAM “Nuevo Amanecer”, y “como el nombre de nuestro centro, para nosotros este espacio es así, un nuevo amanecer, a veces no nos sentimos bien, pero venimos y compartimos con otras abuelas y ya estamos mejor”, expresó Rosita.
Coincidente fue Ana María Moreno, quien consideró que el centro al que acude en el barrio San Roque “es una bendición; con mi marido estamos solos en casa y esto es una distracción hermosa, pasamos espectacular, practicamos danza, folklore, yoga, de todo un poco”, expresó, mientras se preparaba junto al resto de los integrantes para hacer la coreo de un carnavalito, vestidos con la camiseta de la selección argentina.
