[dropcap]C[/dropcap]ómo mantener una buena memoria está dentro de los objetivos de muchas personas de a pie y también es uno de los objetivos de muchos científicos.
¿Qué cosas pueden hacer las personas mayores para mantener una buena memoria? Algunos estudios han mostrado que entrenar le memoria con ejercicios mentales y juegos puede ser una buena estrategia. Otros estudios han abordado la cuestión de si el ejercicio físico puede tener efectos beneficiosos sobre la memoria y cuáles. Es el caso de un reciente artículo publicado por Emrah Duzel, del German Center for Neurodegenerative Diseases en Alemania, junto a otros colaboradores. En su trabajo llevan a cabo una revisión de esta cuestión, haciendo especial hincapié en los cambios cerebrales que tienen lugar cuando se practica ejercicio físico y también los cambios cognitivos que suceden.
Los autores comentan que son escasos aún los estudios que relacionan el ejercicio físico en personas mayores con cambios a nivel cerebral. Los pocos estudios que existen parecen haber encontrado, según ellos, cambios en el hipocampo (estructura cerebral importante en la memoria) y también en marcadores sanguíneos de plasticidad. Según describen, hay estudios que han encontrado que practicar un año de ejercicio físico leve a moderado podría prevenir la atrofia del hipocampo. No obstante, queda aún mucho por averiguar sobre los mecanismos que favorecen estos cambios en relación con el ejercicio físico.
A nivel cognitivo, parece que los resultados no siempre apuntan en la misma dirección y no todos los estudios encuentran mejoría en los test de memoria tras la práctica de ejercicio físico. Al parecer, como explican los autores, esta discrepancia podría deberse a la gran variabilidad existente entre los individuos. En uno de los experimentos que revisaron, se encontró que los cambios en el estado físico y los volúmenes del hipocampo correlacionaron con el rendimiento en una tarea de memoria de trabajo visoespacial.
En este artículo, publicado recientemente en Brain (2016), plantean una última y relevante cuestión. ¿Podemos hacer algo para aumentar el efecto del ejercicio físico sobre el rendimiento cognitivo en mayores? Según explican, una opción sería combinar el ejercicio físico con la estimulación cognitiva, pues algunos estudios sugieren que puede prevenirse el declive del hipocampo. Otras posibilidades serían los tratamientos nutricionales y farmacológicos.
Está claro que los expertos reconocen la gran tarea pendiente que les queda, pero los hallazgos científicos hasta ahora parecen animarnos a cuidar nuestros cerebros con estrategias combinadas como el ejercicio físico, el entrenamiento cognitivo y una buena nutrición. No perdemos nada por intentarlo.
Marisa Fernández, Neuropsicóloga Senior, Unobrain
Fuente: http://www.muyinteresante.es/