(del Espíritu Santo vía Graciela Crucci)
– Entrega N° I
LA ORACIÓN
Se han vaciado mis ojos, señor, de tanto orar
Cambiando el silencio de mi mundo.
Hay sosiego y deleite aquí en mi alma
Y un vacío que me incita a lo profundo.
No ayer ni mañana en mi conciencia,
Sólo este devenir vívido y pleno
Sólo este transcurrir que no transcurre
Perdido en la armonía de lo Eterno.
Déjame aquí Señor, en esta playa
Desprendida de todo y de mi misma
En esta soledad que me contiene
En esta plenitud tan serenísima.
Déjame desde aquí extender mis brazos
Proyectando el Amor que Tú me has dado
Hacia los rincones de la tierra
Y que vuelva hacia mi multiplicado .