[dropcap]E[/dropcap]l empoderamiento de los adultos mayores y el respeto por ello es una deuda pendiente de toda la sociedad hacia ellos. En su última visita a Corrientes el Doctor en Psicología y especialista en Gerontología Ricardo Iacub expresó conceptos muy importantes para compartir acerca dela temática.
“Con las residencias para los adultos mayores se comete un delito muy grave que es llevar al adulto mayor a una institución cuando esta lúcido y puede decidir por él y sus bienes. Si no tiene ninguna enfermedad grave que requiera atención especial”, expresó Ricardo Iacub a “Vivir Plenamente. “Hay que defender el derecho que una persona adulta mayor es capaz mientras no se demuestre lo contrario y es la propia sociedad quien le otorga al “hijo” un poder que a veces es gravísimo y lamentablemente las residencias se ponen de acuerdo para poder contribuir a esto”.
Muy preocupado por la temática y resaltando el valor de la misma, el especialista señaló que existen estudios que muestran el claro desacuerdo de algunas personas por ingresar en lugares en los cuales no quieren estar porque se sienten capaces de poder seguir decidiendo en la vida.
“…se comete un delito muy grave que es llevar al adulto mayor a una institución cuando esta lúcido y puede decidir por él”…
“Hay estudios en la Ciudad de Buenos Aires que demuestran que un 30% de las personas que ingresaron a residencias geriátricas lo hicieron sin estar de acuerdo. Y además se suma a que sin permiso de los hijos los adultos mayores no pueden salir de esas instituciones”, detalló Iacub.
A su vez aclaró “que quede claro que no es maldad de los dueños de las instituciones o residencias geriátricas que quede claro que es la propia sociedad que no entiende que esto es un delito y que en realidad todos somos cómplices. Tenemos una deuda como sociedad que es pensar quienes son los adultos mayores, hasta que no se demuestre lo contrario – a través de profesionales competentes – el adulto mayor es lúcido de disponer de su dinero, de sus tiempos y de su vida”, finalizó.
Para reflexionar y compartirlo.