Gladys Esther Pereyra nos comentó en el último programa de Vivir Plenamente sobre la reunión que tuvieron los miembros de la Junta Promotora a fin de concretar el Consejo Participativo Provincial de Adultos Mayores de Corrientes. “La reunión fue muy buena, desde el punto de vista humano y social. Hemos vuelto a vernos las caras los miembros de la Junta y poder comunicarnos fue hermoso, hace mucho tiempo que no nos veíamos y esta pandemia nos tiene tan aletargados, distantes uno de otros, que celebramos todo tipo de reunión, aunque sea virtual”, relató Pereyra.
Aclaro que pese a que el Consejo Participativo está creado por ley, no está en funcionamiento. “Todas las personas que según la ley deberían integrarlo están en condiciones de hacerlo, solo es cuestión asignar un lugar físico y el equipamiento y mobiliario, así como el presupuesto que corresponde para que el organismo pueda funcionar”, precisó, con la aclaración de que no se requiere dinero para abonar sueldos, sino gastos de comunicaciones, viajes eventuales para resolver problemas in situ y para problemas puntuales que se plantean en etapas de los adultos mayores.
“Los años están pasando y no se concreta, no se pone en funcionamiento el Consejo. Es una deuda que las autoridades provinciales tienen con nosotros, hace muchísimos años se viene luchando por esto, y nos dicen que sí, que se vienen ocupando. De nuestra parte hemos cumplido con todo. La ficha está del lado del tablero de Gobierno”, manifestó la funcionaria.
Los años están pasando y no se concreta, no se pone en funcionamiento el Consejo, es una deuda que las autoridades provinciales tienen con nosotros.
“Vamos a pedir una audiencia con el Gobernador y el ministro de Desarrollo Social. Vamos a empezar a conectarnos y estrechar vínculos con las comunas del Interior, con la gente de los clubes de abuelos, los consejeros del Pami, con todas las personas que están en las temáticas de las personas mayores, que son los que conocen más de cerca los problemas que aquejan a las personas mayores porque están en contacto más permanente. Es necesario que esto de una vez por todas, empiece a funcionar”, destacó Pereyra.
Y hablo de la importancia de una entidad como esta, que al ponerse en funcionamiento, supondrá la desaparición de la Junta Promotora. “Las personas mayores tenemos bastantes problemas de salud, de emoción, de inserción, problemas familiares, con la misma familia, de desatención o maltrato. Por ejemplo la adolescencia tiene su manera de solucionarlos desde una entidad. Y la niñez también. ¿Y los adultos mayores? Estamos bastantes huérfanos por parte de las autoridades. Esta entidad es para bien de todos y mal de ninguno”, concluyó.
