[dropcap]E[/dropcap]l Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (PAMI) anunció a principios de mes algunas modificaciones en lo relativo a la obtención del subsidio social y solidario para medicamentos ambulatorios gratuitos. Se comunicó que a partir de esta semana se exceptuará de dicho beneficio a quienes cobren más de $8.500, tengan un automóvil de menos de 10 años de antigüedad y posean más de un inmueble. Sin embargo, además de este cambio que comenzará a regir desde el viernes, debe sumársele las vicisitudes del conflicto que la obra social tiene con el sector farmacéutico.
El Colegio de Farmacéuticos de Corrientes (COFARCO) lanzó una nueva alerta e informó que al margen de las modificaciones anunciadas por PAMI, todavía no está garantizada la atención para febrero en vistas de que no hubo consenso alguno entre la obra social y las instituciones que agrupan a los farmacéuticos del país.
Silvia Rodríguez, una de las integrantes de mayor trayectoria de COFARCO, comentó: “Acá hay un conflicto que no termina de resolverse, que es entre las farmacias, la industria farmacéutica y el PAMI. Las farmacias estamos con graves problemas de rentabilidad por una deuda millonaria que tiene PAMI y por el sistema de pagos que implementa tanto la obra social como la industria con nosotros”. Y agregó: “Como siempre, son las farmacias chicas y medianas las que más sufren esta situación”.
La Confederación Farmacéutica Argentina (COFA), ente que reúne a todos los colegios profesionales del país, había dispuesto que de no llegarse a un acuerdo antes del 31 de enero las farmacias se verían en la situación de tener que cortar el suministro de medicamentos para afiliados del PAMI.
El problema PAMI-farmacias
El inconveniente es de larga data y radica en que la millonaria deuda nunca termina de saldarse por más de que en varias oportunidades ya se hayan realizado algunos pagos. “En el último encuentro que se tuvo a fines de diciembre, se había llegado una tregua para que durante enero pueda resolverse el conflicto y en febrero abastecer sin inconvenientes. Pero durante la primera reunión con PAMI no generó un buen panorama, por eso es que creemos que se pone en riesgo el abastecimiento para el próximo mes”, explicó Rodríguez. El problema radica en que parte del dinero que aún no llega a las farmacias PAMI asegura haberlo abonado al sector industrial, en tanto que este último sector, por su parte, también alude no haber cobrado.
Rodríguez había explicado: “El sistema es así, PAMI para pagar los medicamentos primero abona a la industria y la industria es la que paga a las farmacias. Pero como entre la industria y PAMI se acusan mutuamente, queremos que las farmacias formen parte y tomen conocimiento cada vez que se paga porque, si no, vivimos con la incertidumbre de no saber cuándo se va a cobrar”.
Corte de la atención
Vale recordar que en el marco del mismo conflicto los representantes de las cuatro organizaciones que agrupan a colegios de farmacéuticos y farmacias de todo el país anunciaron oficialmente que desde la cero hora del miércoles 21 de diciembre se dejó de atender a los afiliados de PAMI.
La deuda que tiene el Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados con el arco farmacéutico del país es de casi dos mil millones de pesos. Ante ello, “el 87% de las farmacias del país no atendió PAMI, esta fue la realidad del primer día de la medida aplicada por las cuatro organizaciones del sector que le estamos pidiendo a ese organismo que realice los pagos correspondientes”, había dicho a época el titular de la Federación Argentina de Cámaras de Farmacias, Miguel Lombardo.
Al día siguiente el conflicto se resolvió con la promesa de que antes del 31 de enero se llegue a un acuerdo. Sin embargo, hasta el momento, la única reunión entre el sector farmacéutico y PAMI no tuvo un buen desenlace. Se espera que en los próximos días haya un nuevo encuentro.
FUENTE: diario época
